Se cree que las instituciones de microfinanciación están más dispuestas a prestar dinero a los prestatarios que los bancos. Por su cuenta y riesgo, las IMF hacen oídos sordos a la falta de ingresos oficiales de un cliente o a su escaso historial crediticio. Pero esa lealtad no debe ser engañosa. Las consecuencias del impago de un microcrédito supondrán graves problemas para el deudor.
Los préstamos de las IMF se diferencian de los préstamos bancarios por el importe máximo legal del préstamo, así como por los tipos de interés más altos y (en la práctica) los plazos más cortos. El préstamo está disponible tanto para fines domésticos como empresariales. Las IMF cobran intereses sobre el importe adeudado, que por ley no superan el 365% anual.
El periodo de desembolso de la IMF rara vez supera el año; el plazo estándar es de unas pocas semanas, a veces meses.
El procedimiento de reembolso se estipula en el contrato entre la IMF y el prestatario: si el prestatario debe reembolsar el dinero y los intereses en una sola cuota o a plazos. Además, existen penalizaciones por retraso en el reembolso (penalizaciones, confiscaciones), que se acumulan después de la fecha de retraso del siguiente pago o de la fecha límite de reembolso de la totalidad del importe. ¿Qué le espera a una persona en caso de incumplimiento de un acuerdo con una IMF?
Desde el primer día de impago, las multas comenzarán a acumularse. ¿Cómo puede evitarlos? ¿De dónde se puede sacar el dinero para pagar si el prestatario está en mora? Hay tres maneras:
Para obtener una prórroga (prolongación) sin tener que esperar a que los pagos estén vencidos. Este servicio es de pago. Algunas IMF están dispuestas a retrasar la fecha de pago final muchas veces con una penalización, otras se negarán de inmediato (es legal). Conviene presentar a la IMF documentos que indiquen el motivo de las dificultades financieras (nacimiento de un hijo, despido, etc.).
Solicite al personal de la IMF la reestructuración de los pagos. Existe la posibilidad de renegociar el calendario para tener en cuenta las circunstancias vitales del cliente por una pequeña penalización. Tendrás que devolver primero los intereses y luego el cuerpo del préstamo. Pero, de nuevo, estas concesiones son un derecho del prestamista, no una obligación.
Refinanciar la deuda con otra entidad financiera. Otras IMF, los grandes bancos van a por ello.
De todos modos, en caso de dificultades financieras temporales, vale la pena ponerse en contacto con el personal de la IMF y tratar de resolver la cuestión de forma amistosa.
Las IMF tienen diferentes sistemas de penalización por retraso en los pagos. El importe puede ser fijo o progresivo. En ocasiones, en el acuerdo no se estipulan ni intereses ni penalizaciones (multas) por retrasos en los pagos, en cuyo caso sus condiciones pueden considerarse leales (a menos, claro está, que contengan alguna "trampa").
Y lo más importante: en caso de incumplimiento por parte de una IMF, el importe de las sanciones y multas no puede superar la propia deuda en más del 50%.
Esta condición se aplica a los contratos de hasta un año de duración. La restricción se aplica a todas las penalizaciones y servicios adicionales previstos por separado en el contrato.
¿Y si no paga el IMF en absoluto? Esto hará que se arruine su historial de crédito.
En cuanto a la "extorsión" de dinero, cada IMF tiene sus propias tácticas. Algunos transfieren el derecho de reclamación a los cobradores, mientras que otros asignan al deudor a un agente de cobros interno.
La ley prohíbe influir en el prestatario física o psicológicamente. Pero los coleccionistas se lo recuerdan regularmente.
Y después de algún tiempo, el caso es probable que vaya a la corte, en su decisión agentes judiciales pueden embargar la propiedad (incluyendo joyas, dinero en efectivo) y las cuentas del prestatario. Si estas medidas no funcionan, se venderá la propiedad de valor y el producto se utilizará para pagar la cantidad adeudada.
Dos escenarios para ayudar a cambiar las cosas:
Por lo general, las IMF (cobradores de deudas), a través de agentes judiciales, intentan periódicamente recuperar su dinero y luego condonan la deuda. El contrato caduca a los tres años.
Autor del artículo: José Rivera
Experto en finanzas de PRÉSTAMOS EN LÍNEA