Toma de Hábito
Es un momento de alegría y de unión en torno a la Vocación contemplativa y monástica, Luego de un tiempo Dios permite sentir más fuerte una atracción a la vida en silencio y dedicarse a meditar y orar en la misericordia divina. Queremos compartir con ustedes familia, amigos, conocidos este momento tan importante de nuestras vidas, un sueño que se hace realidad. Finalmente, a unos días de nuestra Toma de Hábito, pedimos a todos que eleven una oración nosotras.
Donde hemos de morir al mundo y a nuestra vida se oculta en Cristo con Dios, como decía San Pablo (Col 3,3).